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Febrero Loco

Ryan Blotnick y ese toque danés al jazz

Ryan Blotnick y ese toque danés al jazz

 

 

Por fin, volvió Ryan Blotnick a Jimmy Glass y en formato de quinteto, que en principio era cuarteto pero al que se añadió Albert Sanz. Deseando estábamos escucharle a él y sus propuestas pues en su anterior concierto iba de acompañante de Bill McHenry y autorelegado a un segundo plano lo que nos dejó con las ganas de volver a disfrutarlo, tras haberlo disfrutado tantísimo en su anterior concierto como líder, cargado de nuevas propuestas y frescura. Ryan es de nivel interiorizado y muy rico y ya nos quedó claro cuando lo escuchamos de que nos traería muchas más sorpresas y hoy ha sido una.

 

Acompañado del caminar del baterista Kresten Osgood que como después de un buen orgasmo se expandía en el tiempo, acariciando los silencios y destacando pequeñas intrusiones de ritmos expandidos, cuando no te despertaba del letargo con una conjunción de plato y bombón como un chasquido que te arrancaba a todo lo bueno que iba a suceder, como un Ryan Blotnick con reducciones de flamenco como preludio a un solo inocente o un Jonas Westergaard que abordaba un Spiritual desde el contrabajo captando la esencia magistralmente de lo tan introspeccionado llevándolo a un solo en el que la guitarra de Ryan transportaba en progresión el espiritual al blues con maestría; el saxo de Ned Ferm como una eyaculación alargada en el tiempo rafageaba el aire por todas las notas consiguiendo un sonido de graves que perduran con toque de placer y calidez y por detrás surgía un manantial, el piano de Albert Sanz que chickcoreaba como nunca lo había hecho en una progresión que siendo improvisada dentro del cuarteto se adentraba en él y se ajustaba al rollo dándole su toque de maestría. Albert Sanz está familiarizado con el trabajo de Blotnick tras haber compartido la grabación en Barcelona de Music needs you, un precioso e interesante álbum y de Everything forgets  en Girona.

 

Un todo. Puro placer al posar los ojos sobre el batería Kresten Osgood que acariciaba el parche a mano abierta, rozaba el plato con el extremo de la baqueta, tocaba el eje del charles y todo lo que tenía a su alcance, cubría la caja con un foulard, se deleitaba en los silencios, silbaba o cantaba.

 

Un Jason que percutía el contrabajo como solo él sabe hacerlo dando fuerza y situación.

 

Un Ned Ferm al saxo tenor que fluía con agilidad y rapidez por todos los registros con sonoridad perfecta o vibraba la caña para distorsionar los sonidos en los momentos justos.

 

Un Albert Sanz al piano, que surgía tras sus discretos acompañamientos captando el concepto de los temas con maneras nuevas y cargadas de su virtuosismo

 

Y un Ryan Blotnick que va profundizando en estilos, despojándolos de formas para llegar a su reducción y extraerles la esencia, que promete muchísimo. Esperamos contar con este interesante proyecto muy pronto en forma de CD para disfrutarlo con tiempo y atención.

 

En resumen, un concierto de agradecer tal y como ellos agradecen el tocar en Jimmy Glass porque tenemos un ojo o los dos puestos en Ryan y esperamos verlo de nuevo en su despliegue progresivo.



¡Gracias Ryan!

Tak for din Musik!

¡Gracias Jonas!

¡Gracias Ned!

¡Gracias Kresten!

¡Gracias Albert!

¡Gracias al Jimmy Glass!

 

http://www.ryanblotnick.com/

http://www.osgood.funky.dk/

http://jonmccaslinjazzdrummer.blogspot.com/2010/05/kresten-osgood.html

http://www.barharborjazzfest.com/ned-ferm

 

http://www.jimmyglassjazz.net/

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