Julio Cortázar (1914-1984) poeta
Un doce de febrero de 1984, en París, Julio Cortázar abandonó su cuerpo y nos dejó. Y nos dejó su palabra, su mundo de magia, fantástico y real, creador de otra realidad, más libre. Carlos Fuentes dijo: “Cuando Julio murió, una parte de nuestro espejo se quebró y todos vimos la noche boca arriba”.
“Soy por naturaleza un solitario”, decía. Ya de niño, su madre tuvo que obligarle a dejar los libros y a salir, Julio pasaba horas leyendo o escribiendo. Quizás el hecho de que, cuando tenía sólo seis años, su padre abandonara a su madre con dos hijos, en una época en que la independencia de la mujer no sólo no existía si no que era impensable, le llevó a buscar un barco en el que navegar y crear sus sueños: la Literatura. Influenciado por la lectura de unos poemas de Edgar Allan Poe escribió sus primeros versos, sus primeros poemas, emulándolo. Más tarde escribió otros con un estilo más personal y un pariente, que los leyó, le dijo a su madre que eran copiados, su madre dudó de él y le preguntó si los había copiado. Fue su primer desengaño “fue para mi un primer golpe de esos que te marcan para siempre”.
A los 9 años escribió su primera novela, en el jardín de la casa, donde pasaba horas sentado en un árbol, la novela fue germinando, con un tono trágico, donde muchos morían, su madre la guardó para que no la rompiera.
Julio no quería publicar con su nombre hasta no estar seguro de que lo que escribía era realmente digno de ser leído y, así fue como, se editó, su primera obra poética “Presencias” bajo el seudónimo de Julio Denis, se editaron 250 ejemplares que fueron destinados más que nada a los amigos y allegados, eso fue en 1938.
Este poema pertenece a esa primera obra editada de Julio Denis (Cortázar):
Súplica
Yo te pido, Señor, que esta existencia
vista su faz de nieve no posada.
Quiero verla hecha luz -ya deslumbrada
en su afán de alumbrar-albo de esencia
singular. Que no sea su presencia
un número en la cifra inacabada
Dale una voz, Señor; no le des nada
sino voz para alzar toda su ciencia.
Yo te pido un latido del futuro
en que el mundo comprenda que ha tenido
fragmentos de su Dios en un poeta:
dale voz y valor frente a lo oscuro
luego, déjalo solo, que ha nacido
para surcar el viaje hecho saeta.
Y hecha la súplica navegó hacia otros poemas:
El Encubridor
Ese que sale de su país porque tiene miedo,
no sabe de que,
miedo del queso con ratón,
de la cuerda entre los locos,
de la espuma en la sopa.
Entonces quiere cambiarse como una figurita,
el pelo que antes se alambraba
con gomina y espejo lo suelta en jopo,
se abre la camisa, muda de costumbres,
de vino, de idioma.
Se da cuenta, infeliz, que va tirando mejor,
y duerme a pata ancha.
Hasta de estilo cambia,
y tiene amigos que no saben su historia provinciana,
ridícula y casera.
A ratos se pregunta como pudo esperar
todo ese tiempo
para salirse del río sin orillas,
de los cuellos garrote,
de los domingos, lunes, martes, miércoles y jueves.
A fojas uno, si, pero cuidado:
un mismo espejo es todos los espejos,
y el pasaporte dice que naciste y que eres
y cutis color blanco, nariz de dorso recto,
Buenos Aires, septiembre.
Aparte que no olvida,
porque es arte de pocos,
lo que quiso,
esa sopa de estrellas y letras que infatigable comerá
en numerosas mesas de variados hoteles,
la misma sopa, pobre tipo,
hasta que el pescadito intercostal
se plante y diga basta.
Antes, después
como los juegos al llanto
como la sombra a la columna
el perfume dibuja el jazmín
el amante precede al amor
como la caricia a la mano
el amor sobrevive al amante
pero inevitablemente
aunque no haya huella ni presagio
aunque no haya huella ni presagio
como la caricia a la mano
el perfume dibuja el jazmín
el amante precede el amor
pero inevitablemente
el amor sobrevive al amante
como los juegos al llanto
como la sombra a la columna
como la caricia a la mano
aunque no haya huella ni presagio
el amante precede al amor
el perfume dibuja el jazmín
como los juegos al llanto
como la sombra a la columna
el amor sobrevive al amante
pero inevitablemente
Poema
Te amo por ceja, por cabello, te debato en corredores
blanquísimos donde se juegan las fuentes de la luz,
te discuto a cada nombre, te arranco con delicadeza de cicatriz,
voy poniéndote en el pelo cenizas de relámpago
y cintas que dormían en la lluvia.
No quiero que tengas una forma, que seas
precisamente lo que viene detrás de tu mano,
porque el agua, considera el agua, y los leones
cuando se disuelven en el azúcar de la fábula,
y los gestos, esa arquitectura de la nada,
encendiendo sus lámparas a mitad del encuentro.
Todo mañana es la pizarra donde te invento y te dibujo,
pronto a borrarte, así no eres, ni tampoco
con ese pelo lacio, esa sonrisa.
Busco tu suma, el borde de la copa donde el vino
es también la luna y el espejo,
busco esa línea que hace temblar a un hombre
en una galería de museo.
Además te quiero, y hace tiempo y frío.
Poema 2
Empapado de abejas
en el viento asediado de vacío
vivo como una rama,
y en medio de enemigos sonrientes
mis manos tejen la leyenda,
crean el mundo espléndido,
esa vela tendida.
El simulacro
Cada vez que te encuentro en el recuerdo
y canta en plena noche el gallo grana,
una sed de combate y de campana
me lanza al sacrificio en que te pierdo.
Quién sabe dónde estás, ya ni me acuerdo
si eran tus ojos de oro o de avellana,
pero mi sangre es esa luz que mana
y en la dulce manzana otra vez muerdo.
¡Oh balbuceo en la tiniebla, duelo
de musgo y de leopardo y de gemido,
desesperada imitación de cielo!
Luego es ceniza y sórdida alborada,
el derrotado sueño, el pozo herido
de una sola cabeza en una almohada.
*
Y su último poema lo escribió a finales de 1983 y se llamaba
Negro el diez
1
Empieza por no ser. Por ser no. El Caos es negro.
Como es negra la nada.
2
Nace la claridad, su gallo triza el cielo,
se esponjan los colores
vanidosos.
Pero el negro se ahínca primigenio. Toda luz
en el carbón se abisma, en el basalto.
3
Les physiciens appellent corps noirs tous ceux
qui absorbent intégralement les radiations reçues.
E.U.
Para mejor lanzarlos al asalto
del día. (Goya pudo decirlo).
4
Socavón en la sangre, en la memoria,
lo negro sube a la palabra, es la tormenta
rabiosa de los odios y los celos:
Othello es blackamoor, el moro negro
siempre, para el lívido Yago.
5
Padre profundo, pez abismal de los orígenes,
retorno a qué comienzo,
Estigia contra el sol y sus espejos,
término de los cambios,
última estela de las mutaciones,
palabra del silencio.
6
Su palacio nocturno: el sueño, el párpado
sedosa guillotina del diurno pavorreal
para que sólo las similitudes
desplieguen sus tapices de morado, de púrpura y de óxidos,
harem del negro, esperma de los sueños.
7
Se diría que le gusta que lo aplanen, lo espatulen,lo tiendan en
lisas superficies, como se hace aquí. Se diría que ama ser el
trampolín desde donde saltan los colores, su callado sostén.
Todo es más contra el negro; todo es menos cuando falta.
8
Cedes a estas metamorfosis que una mano enamorada
cumple en ti, te llenas de ritmos, hendeduras, te
vuelves tablero, reloj de luna, muralla de aspilleras
abiertas a lo que acecha siempre del otro lado,
máquina de contar cifras fuera de las cifras, astrolabio
y portulano para tierras nunca abordadas, mar
petrificado en el que resbala el pez de la mirada.
9
Caballo negro de las pesadillas, hacha del
sacrificio, tinta de la palabra escrita, pulmón
del que diseña, serigrafía de la noche,
negro el diez, ruleta de la muerte, que se
juega viviendo.
10
Tu sombra espera tras de toda luz.
Julio Cortázar
*
Cortázar dice que los versos llegan y te quedan tatuados, y eso le ocurre con un verso de Lorca “lo tengo tatuado en la memoria -“pulso herido que sonda las cosas del otro lado”- recita. El poeta busca el otro lado y Lorca lo encontró”- dice.
Lee el poema de Lorca es increíble:
http://artespoeticas.librodenotas.com/artes/1495/poema-doble-del-lago-eden
Y hemos penetrado en su intimidad porque Julio decía que “los poemas son siempre muy para mi”. La poesía le hablaba, pero el verdadero rítmo lo encontró en los cuentos. “El terreno del cuento es mi terreno de trabajo. Soy un cuentista más que un novelista.” Pero Julio dejó grandes novelas, devoradas novelas, que eran una ventana a otra forma de ver el mundo, una nueva forma que hoy pasea por las calles como si siempre hubiera existido. Julio cuestionaba las palabras, lo establecido e incluso la propia realidad que para él era confusa. Entre sus confusiones había “recuerdos que me atormentaban de imágenes dispersas inconexas que no relacionaba, baldosas de colores,…” le preguntó a su madre y ella le explicó que habían vivido en Barcelona, desde que tenía un año y pico hasta los tres años, y que él jugaba en el parque Güel, allí comenzó su admiración por Gaudí. También, recordaba, una playa, grandes olas, mucho sol y un olor a sal inquietante.
Julio Cortázar sentía que el camino positivo de la humanidad es el mestizaje, de hecho su apellido es de origen vasco, su bisabuelo era vasco y, por parte de madre, hay raíces francesas y alemanas. Quizás esa mezcla, ese mestizaje, fue lo que no dejaba a su mente asimilar la realidad sin cuestionarla, sin verla por todos sus lados, hasta desnudarla. Y quiso mostrarla con el lenguaje exacto de sus personajes, porque Julio Cortázar había conocido varios lenguajes desde muy niño y sabía apreciar la diferencia de los mismos no sólo de expresión o de sonido, si no en relación con los contextos. “Mi noción de estilo es muy exigente porque si tienes alguna cosa que decir y no la dices con el exacto lenguaje con que tiene que ser dicha, no la dices”, y ahí se abre su ruptura con el lenguaje académico, con lo correcto.
Julio Cortázar no era un ser intelectual, era instintivo e intuitivo “Yo tengo poca ideas, no se pensar, creo que tengo intuiciones…no soy un hombre de ideas. Me siento más cómodo en un terreno que toca lo irracional.” Cortázar dejaba entrar a la fantasía en el terreno de lo real, incorporada, fusionada el mundo mágico y real sin fisuras, una aleación, donde el espacio y el tiempo perdían su razón de ser. “Mi noción de fantástico era un terreno en el que yo me movía y no tenia nada que ver con la noción de fantástico de los demás. Mi realidad es una realidad donde lo fantástico y lo real se entrecruzan continuamente”. La realidad, para Cortázar, es un modelo para armar.
Julio Cortázar no es intelectual y por supuesto tampoco es metódico, de repente le asalta una idea y le ronda, escribe pequeñas frases, en papeles que encuentra cuando le vienen, en un bar, en un tren, en un avión, y le va llegando el cuento, que ya está ahí, durante años, va creciendo dentro de él y, de repente, llega, ya claro y, entonces, se sienta y escribe, sin noción del tiempo, sin comer o dormir, se entrega a la plasmación de ese germen que ha ido creciendo poco a poco, día a día, dentro de él. Y así surge lo fantástico a la realidad. “El sentimiento de lo fantástico no se puede explicar lógicamente, está y se acabó. Y no hay más que hablar.” Luego está la música, el ritmo, y dentro de la música el jazz. “Louis Armstrong es uno de mis dioses, mis dioses están en la tierra, no en otro lado.” “El jazz es para mi una presencia continua, incluso en lo que escribo,… hay una especie de latido, de swing, una especie de ritmo que si no está en lo que yo hago es para mi la prueba de que no vale y hay que tirarlo y volver….”.
Y comenzó su tropiezo con lo establecido en su primera novela “El examen” (1950), una novela que muestra el Buenos Aires de aquellos momentos, de manera precisa y que él cree que si se hubiera publicado habría influido en lo que ocurrió en Argentina en aquella época. Pero estaba cargada de palabrotas y sus personajes hablaban de forma vulgar y por ello no fue publicada, solo existían un par de manuscritos. “El Examen” no se publicó hasta después de su muerte en 1986. Aquí solo una pincelada del “El examen”: “Una vez soñé que me castigaban con la pena capital- dijo Andrés- Entendé que no aludo a la muerte; todo lo contrario. La pena era capital porque consistía en vivir del otro lado del sueño, acordándome todo el tiempo que lo había olvidado, y que el castigo era eso, haberlo olvidado.”
“Divertimento” escrita en 1950, también fue publicada póstumamente en 1986. El taller del pintor surrealista Penato Lozano, es el lugar de reunión del “Vive como puedas” un grupo delirante que debate sobre poesía, arte, música, política,… , un grupo variopinto que incluye a un mentalista, un fantasma, una pesadilla o una pintura inexplicable. “Divertimento”, es eso, una comedia irónica que gira sobre el mundo artístico y la sociedad que lo rodea.
La naturaleza intuitiva se muestra en Cortázar de manera clara en su inspiración para escribir “Los Reyes” (1949). Esta obra nació en un autobús, “un colectivo”, de repente una voz le habló, con un lenguaje que él desconocía, el del mundo de los griegos y su mitología, como si algo oculto en su interior, como parte de sus genes se manifestara de repente, explicándole la historia pero de otra forma, como un grito latente del pasado que encontrara un hueco donde hacerse eco y, así, nació el mito de Teseo y el Minotauro pero visto al revés; donde el héroe era el Minotauro, que era el poeta, el hombre libre y diferente, al que la sociedad teme y encierra en el laberinto; Teseo era el perfecto defensor del orden que entra a hacerle el juego al rey, el gangster del rey que va a matar al poeta. “Los Reyes” causó un gran escándalo en los medios académicos.
Léela:
http://www.librosgratisweb.com/pdf/cortazar-julio/los-reyes.pdf
En 1951 nació el primer libro de cuentos “Bestiario”, con su “Casa tomada”, resultado de una pesadilla pero que mostraba su subconsciente y en cierta medida el de muchos argentinos de la época de Perón. Una casa que iba siendo tomada por no se sabía qué hasta que su habitante, tras ir cerrando puertas, abandonando zonas de la casa, se ve en la calle.
En 1956 se publica “Final del juego” otro libro de cortazianos cuentos inolvidables.
Y, luego, se traslado a Italia a traducir las obras completas de Edgar Alan Poe, una petición de Francisco Ayala, amigo suyo, que sabía de su admiración por el escritor y le propuso traducir toda su obra para la Universidad de Puerto rico.
Luego vinieron más cuentos “Las armas secreta” publicado en 1959. Donde se encontraba una verdadera joya: “El perseguidor”, un homenaje a Charlie Parker, Johnny Carter, en el cuento. Pero que queda explícito en la dedicatoria: In memorian Ch. P. seguido de un: Sé fiel hasta la muerte - Apocalipsis, 2,10. y O make me a mask - Dylan Thomas. Donde Johnny Carter vive una experiencia increíble en el metro y donde dice la célebre frase “esto lo estoy tocando mañana” . Transcribo, dice así: “Y justamente en ese momento, cuando Johnny estaba como perdido en su alegría, de golpe dejó de tocar y soltándole un puñetazo a no sé quién dijo: "Esto lo estoy tocando mañana", y los muchachos se quedaron cortados, apenas dos o tres siguieron unos compases, como un tren que tarda en frenar, y Johnny se golpeaba la frente y repetía: "Esto ya lo toqué mañana, es horrible, Miles, esto ya lo toqué mañana", y no lo podían hacer salir de eso, y a partir de entonces todo anduvo mal,…”
Pincha en”textos de Julio Cortázar” y en “Final del juego” ahí está “El perseguidor”, una joya:
http://www.geocities.com/juliocortazar_arg/juliocortazar2.htm
El Perseguidor leído, no te lo pierdas con imágenes y música de "The bird" el pájaro y la voz argentina afrancesada de Julio Cortázar:
http://video.google.com/videoplay?docid=2529528103991194387&vt=lf&hl=un
En su novela “Los Premios”, publicada en 1960, maneja hasta 18 personajes y eso le dio seguridad pues comprobó que podía manejarse en un universo novelesco semejante al de Cervantes en “El Quijote”, todo un reto.
En “Historias de cronopios y de famas” publicada en 1962 crea los famosos cronopios. Cortázar explica como nacieron, todo empezó, también, así, de repente. En 1952 asistió a un gran homenaje a Igor Stravinski, uno de los músicos que tanto le marcaron, estaba muy conmovido viendo por primera vez a Stravinski, que dirigía la orquesta y a Jean Coucteau, otra gran presencia de su juventud, recitando en una de las obras. En el entreacto, la gente salió y…”me quede solo en ese inmenso teatro y, de golpe, me acuerdo muy bien de eso, de golpe, tuve la sensación de que había en el aire personajes indefinibles, una especies de globos, que yo los veía de color verde, muy cómicos, muy divertidos y muy amigos, que andaban por ahí y circulaban y su nombre era cronopios, se llamaban cronopios venían así. ….” Y luego, en la novela, cuando los define, busca la definición y toman “un aspecto relativamente humano, nunca son concretamente seres humanos con conducta especial del Cronopios, que son la conducta del poeta, del asocial al margen de las cosas, frente a los cuales se plantan los Famas, que son los grandes gerentes de los bancos y las repúblicas, la gente formal que defienden el orden de las cosas y las Esperanzas son personajes intermedios están un poco a mitad de camino y un poco sometidos a la influencia de los cronopios y los famas según la circunstancias y todas esas aventuras que les suceden dependen de la psicología de ellos.”
Y, después, llegó “Rayuela”, en 1963, una novela que cambió muchas cosas, entre otras la relación entre el lector y la obra, pues “Rayuela” tiene múltiples lecturas y es el lector el que elige el orden en el que quiere leer la novela. “Rayuela” se puede leer de muchas formas y nunca es el mismo libro. “Es algo que es la experiencia de toda una vida y la tentativa de llevarla a la literatura”. Una Contranovela, la tentativa de eliminar el contacto entre la novela y el lector. Modificar la actitud del lector, la actitud del lector es una actitud pasiva, y se le ocurrió que el lector tuviera diferentes opciones y, así, lo colocaba a un nivel mas cercano al autor, dándole un papel activo y no pasivo en relación con la novela, crear a un lector cómplice. “Mi tentativa para ir hasta el fondo de un largo camino, de negación de la realidad cotidiana, y de admisión de otras posibles realidades, de otras posibles aperturas”.
En 1966 se publica otro libro de cuentos “Todos los fuegos el fuego”. Con el hermoso cuento “La señorita Cora” o “La autopista del Sur” una premonición del futuro.
Más tarde “La vuelta al día en 80 mundos” en 1967, “Un tal Lucas” en 1979. “Queremos tanto a Glenda” en 1980, un homenaje a Glenda Jackson; luego, “Deshora”, en 1982.
En 1968 publica “62 modelo para armar”, que también le llegó “sentí venir los pedazos del mosaico, como me pasa siempre, partiendo de una hipótesis del Rayuela, en el capitulo 62.”
Luego entra en otros formatos “Buenos aires, buenos aires”, es un libro que ilustra unas fotos de Buenos Aires que le enviaron. O “Último Round” publicado en 1960, con el formato que recordaba a los almanaques, “esos libros en los que podías encontrar desde una receta de cocina, hasta un calendario y consejos para curarse el resfriado”. También rehizo un comic “Fantomas” que le llegó, enviado por un amigo porque aparecía él como uno de los personajes y aprovecho para dar a conocer la sentencia del Tribunal Bertrand Russel del que era miembro, y que juzgo la violencia y la tortura de los regímenes de extrema derecha del cono sur. Una sentencia que no tenía un valor práctico pero si moral y que fue bloqueada a nivel informativo. Cortázar pensó que si ellos habían utilizado su persona en el cómic, bien podía, él, utilizar el comic para hacer llegar el resultado de la sentencia. Y así fue, el Fantomas reescrito por Cortázar se vendió en todos los kioscos.
Sin sentirse político, pero si dolido del dolor, de los datos escalofriantes de las torturas nació “El Libro de Manuel”, la realidad entraba en la fantasía, esto no le gustó a Cortázar porque la realidad impone su ritmo “es el peor de mis libros, soy muy vago, escribo cuando me da la gana y me tomo el tiempo que necesito, pero lo hice como si me lo hubiesen encargado y me lo encargaba yo mismo”. Introdujo la realidad en la historia haciendo que los personajes leyeran las mismas noticias que él leía en los diarios y, eso, durante 6 meses pero, lo que sucedía en la realidad, condicionó la evolución de la novela.
Bueno, esta son algunas de sus obras pero hay más, consulta aquí:
http://www.juliocortazar.com.ar/obras.htm
Su biografía:
http://www.juliocortazar.com.ar/suvida.htm
Si dispones de 2 horas esta es una entrevista para la TVE, que se grabó en 1977, realmente magnífica y muy completa, es un testimonio único de Julio Cortázar:
http://video.google.com/videoplay?docid=-3562250863327291954&sourceid=docidfeed&hl=es/
Su obra y su voz:
http://www.juliocortazar.com.ar/suvoz.htm
Instrucciones para llorar. Dejando de lado los motivos, atengámonos a la manera correcta de llorar, entendiendo por esto un llanto que no ingrese en el escándalo, ni que insulte a la sonrisa con su paralela y torpe semejanza. El llanto medio u ordinario consiste en una contracción general del rostro y un sonido espasmódico acompañado de lágrimas y mocos, estos últimos al final, pues el llanto se acaba en el momento en que uno se suena enérgicamente. Para llorar, dirija la imaginación hacia usted mismo, y si esto le resulta imposible por haber contraído el hábito de creer en el mundo exterior, piense en un pato cubierto de hormigas o en esos golfos del estrecho de Magallanes en los que no entra nadie, nunca. Llegado el llanto, se tapará con decoro el rostro usando ambas manos con la palma hacia adentro. Los niños llorarán con la manga del saco contra la cara, y de preferencia en un rincón del cuarto. Duración media del llanto, tres minutos.
Julio Cortázar
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